PERCEPCIONES, REPRESENTACIONES, significados e identidades particulares y contextualizadas hacen parte de la geografía cultural. Estas dimensiones permiten indagar sobre las relaciones y los procesos de construcción social del territorio desde la perspectiva de los actores y su capacidad de acción. Un estudio de este tipo implica considerar las dinámicas políticas y las relaciones sociales, en donde las experiencias cotidianas e históricas de diversos pueblos, grupos y culturas transforman sus entornos y sus prácticas culturales, atravesadas por subjetividad, poder, clase, género, sexualidad y etnicidad. Los diversos enfoques de la geografía cultural implican el desarrollo de metodologías acordes con las dinámicas socioculturales, para entender y analizar las experiencias cotidianas, las historias de vida y las trayectorias de movilidad que reconfiguran las interpretaciones de los actores sociales sobre y acerca del espacio, el lugar y los paisajes en contextos de poder, con nuevos significados sobre lo político. Son estas las dimensiones que este número presenta, al incluir textos que exploran diversas perspectivas desde la geografía cultural, las cuales requieren mayor consolidación en Colombia y la apertura de nuevas áreas de investigación.
En su gran mayoría, los artículos que conforman esta edición evidencian propuestas relacionadas con la geografía cultural y sus metodologías. Sin embargo, estos no son presentados de manera secuencial, sino que se intercalan para permitir al(a la) lector(a) un dialogo entre diversas perspectivas geográficas. Así, vale la pena destacar algunas tendencias y propuestas en los análisis de los textos. Por ejemplo, discusiones en torno a estudios de paisajes, en los cuales se evidencia la articulación de procesos históricos con dinámicas de reconfiguración, dada la movilidad de actores sociales, las apropiaciones juveniles de lugares particulares o las dinámicas capitalistas que transforman los contextos rurales y urbanos. De la misma forma, los textos aquí presentados dan cabida a nuevas representaciones a través de cartografías sociales, cartografías de abstracción subjetiva o cartografías que responden a percepciones de jóvenes y de músicos, y a percepciones que son producto de intereses, deseos y subjetividades de gestores ambientales o votantes electorales, destacando la construcción cultural de paisajes urbanos y contemporáneos. Así mismo, se exploran las reconfiguraciones territoriales en los contextos urbanos de acuerdo a procesos económicos, dinámicas migratorias o políticas públicas.
Susana Barrera Lobatón, basada en las discusiones con el grupo de investigación Estepa, replantea el concepto de espacio y el acceso a la información geográfica, para proponer la inclusión de procesos participativos en donde la toma de decisiones sobre las políticas o acciones territoriales responda a intereses locales y democráticos, y a la posibilidad de proponer qué, cómo y para quién se representa. Jéssica Rosalba Villamil Ruiz se centra en las prácticas musicales de un grupo de migrantes de la Costa Caribe colombiana en Bogotá, analizando las estrategias de apropiación territorial en contextos urbanos y presentando, además, una cartografía elaborada a partir de los sentidos de lugar de los músicos. Por otra parte, Ademir Divino Vaz aborda los procesos de construcción de identidad romaní (gitano) y su relación con la territorialidad en Ipameri, Brasil. Finalmente, Norma B. Monzón analiza las dinámicas electorales, incluyendo la subjetividad y las elecciones individuales en los comportamientos electorales bajo una perspectiva espacio-temporal en Argentina.
Nuevas formas de planificar lo urbano son exploradas por María Laura Rubio Farinelli y Silvia Alicia Santarelli Serer, quienes proponen tomar como punto de partida las percepciones, emociones y referentes de los adolescentes, para que la planificación urbana contenga conceptos de estética y funcionalidad en la ciudad de Bahía Blanca, Argentina. En una perspectiva similar, Gabriela Ethel Benítez, mediante el análisis de procesos educativos, propone partir de la enseñanza de la geografía, para que los jóvenes escolares replanteen su relación con el entorno y, a su vez, las acciones de los diversos actores sociales que han conllevado al deterioro ambiental en Colonia del Sacramento, Uruguay. Fernando Gabriel Sabuda estudia la relación entre las características socioculturales de los hogares y los rendimientos académicos de los escolares en Buenos Aires, Argentina, evidenciando las relaciones espaciales que configuran la vulnerabilidad educativa en el área del partido General de Pueyrredón.
Los paisajes urbanos se van reconfigurando históricamente por diversas causas, desde políticas económicas hasta interacciones entre humanos y naturaleza. Luis Alberto Salinas Arreortúa analiza los impactos socioterritoriales que se han generado en la municipalidad de Chalco, estado de México, producto de la implementación de políticas neoliberales. Por su parte, Henrique Fürstenau Togashi revisa los diversos significados del concepto de paisaje con el fin de proponer nuevas herramientas teóricas con miras a entender la interrelación humana con su entorno, específicamente, en bosques que tienen presión urbana. Ahora bien, dado que los límites entre lo rural y lo urbano son difusos, acorde con dinámicas socioterritoriales, se requiere de herramientas conceptuales y metodológicas novedosas para entender dichas dinámicas. En este sentido, Alcione Talaska, Almir Arantes y José Antonio Assumpção Farias analizan las metodologías existentes de identificación de lo urbano y lo rural en Brasil, para presentar una planificación a partir de las características particulares de un territorio y de sus problemáticas que permita implementar políticas públicas de desarrollo rural y urbano acordes con dichos territorios. Carlos Andrés Ochoa Villa analiza la morfología urbana de Yolombó en Colombia, teniendo en cuenta las diferentes transformaciones que ha sufrido el paisaje desde su fundación, utilizando para ello perspectivas culturales y el estudio de fuentes históricas documentales y cartográficas.
En general, todos los artículos evidencian la importancia de la comprensión de la dimensión cultural, en donde son necesarias nuevas concepciones, representaciones y apropiaciones de los paisajes, los lugares y los territorios urbanos o rurales, en la búsqueda del reconocimiento de la subjetividad, de la diversidad cultural y de las identidades individuales, étnicas, generacionales y políticas. Estos aspectos resultan indispensables para el análisis y aplicación de las estrategias de planificación, para el replanteamiento de la educación, para las reconfiguraciones urbanas llevadas a cabo a partir del reconocimiento de la vulnerabilidad social o de la presencia de nuevos actores sociales y para la reorientación de tecnologías o la elaboración de nuevas herramientas metodológicas y conceptuales que permitan la consolidación de una perspectiva geográfica cultural para el entendimiento de las relaciones socio-espaciales en diversos ámbitos.
Astrid Ulloa
Directora–Editora
Cuadernos de Geografía
Revista Colombiana de Geografía