Summary
Tomado de "El Tiempo". Bogotá, marzo 19 de 1938 Honda conmoción produjo ayer en Bogotá la noticia de la muerte de Federico Lleras Acosta. Es extraño el caso de que una investigación científica como la que venía adelantando Lleras Acosta haya apasionado a los colombianos. La república entera se sentía orgullosa de que en los esquivos dominios de la bacteriología triunfara un colombiano, y tuviera la probabilidad muy próxima de cosechar laureles en una conferencia universal.